jueves, 23 de abril de 2009

BOLETIN DE OPINION 24.04.09

ALERTA SANITARIA

Suspenden clases en DF y Edomex por influenza

Redacción

El Universal

Ciudad de México

Viernes 24 de abril de 2009

Asegura el secretario de Salud que el número de casos de este mal en comparación a días previos no ha crecido.

Las Secretarías de Salud y Educación Pública consideraron conveniente la suspensión de clases en el área metropolitana, desde preescolar hasta universidades, ante la incidencia de casos de influenza. El titular de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, destacó el número de casos, con relación a los registrados en días previos, no ha aumentado.

El funcionario hizo recomendaciones a la gente para evitar el contagio.

Entre ellas, mantenerse alejados de las personas con infección respiratoria, lavarse las manos con agua y jabón, no compartir alimentos, ventilar la casa y las oficinas, mantener limpios los cosas de uso común. En caso de corroborarse la enfermedad, se recomienda visitar al médico y no automedicarse, tomar reposo y cubrirse nariz y boca. Después de las 24 horas, sin ningún síntoma se puede regresar a las actividades normales.

NARCO, IGLESIA Y ESTADO

Por César Sánchez

La Iglesia mexicana hace una vez mas actos que asumen su cercanía al narcotráfico, cuando el arzobispo de Durango Héctor González Martínez. Esta declaración muestra la intromisión del narcotráfico no solo en la vida económica del país, sino que empieza a ser parte integral de la vida del mexicano.

En la historia de México la Iglesia ha estado siempre relacionada hacia los grandes grupos de poder, solamente hay que recordar el asesinato en Guadalajara del Cardenal Posadas presumiblemente por parte del narcotráfico. La cuestión importante aquí es la doble moral de la Iglesia que siempre ha generado, ya que la doctrina católica que profesan en sus templos al momento de llevarla a la praxis, son los mismos curas, arzobispos etc., los encargados de negarla o contradecirla. Por otra parte las declaraciones del arzobispo de Durango, dan a conocer la ineptitud o mas bien el respaldo que hay del Estado hacia ciertos narcotraficantes, “Todos sabemos que el Chapo vive en Durango”, parece ser que todo ciudadano conoce el paradero del delincuente con excepción del Estado.

LasVenas Abiertas de Amèrica Latina

Hace algunos días los mandatarios de los países de América se reunieron en Puerto España, Trinidad y Tobago en la quinta cumbre de las Amèricas. Esta cumbre tuve grandes avances diplomáticos entre los países, especialmente entre Hugo Chávez presidente de Venezuela y Barack Obama presidenta de Estados Unidos. Este encuentro puede ser una nueva era en el continente Americano, especialmente en el Latinoamericano, ya que en años anteriores Estados Unidos era visto por los latinoamericanos como el gran imperio que suprimía los intentos de autonomía, y no es para mas, ya que fue el mismo gobierno norteamericano quien apoyo las diferentes dictaduras en siglo XX en varios países del continente. Estas venas abiertas de América Latina tienen esta vez la oportunidad de cerrarse si se crean relaciones de ayuda entre las naciones del continente. Aun así cabe recordar que en la cumbre no hubo ningún acuerdo político o económico, sino que fueron más las sonrisas y los buenos deseos. Tendremos que esperar las acciones de los gobernantes para poder confirmar lo sucedido en la quinta cumbre de las Americas.

¿Probó Ferrocarriles Suburbanos suficiente ineficacia como para serle retirada la concesión?

Por Allan Orozco

Con bombo y platillo fue anunciada la inauguración del Tren Suburbano, obra que reduce significativamente el tiempo de viaje de millones de mexiquenses de sus hogares a sus puntos de trabajo. La obra, como varias obras inauguradas en el país, fue inaugurada en medio de presiones políticas (sería una vitrina más para el gobernador mexiquense de aspiraciones presidenciales, Enrique Peña Nieto) pero además, fue inaugurada en medio de varios señalamientos que apuntaban que la obra no estaba terminada en su totalidad.

El pasado ocho de marzo, dos trabajadores que realizaban obras de mantenimiento en el Sistema 1 del Tren Suburbano, a la altura de la estación Lechería, murieron arrollados. La información fue publicada en diversos diarios de circulación nacional y también en varios medios electrónicos. El zénit del drama suburbano llegó el pasado sábado 18 de abril, cuando dos unidades del Tren Suburbano chocaron y pese a que no se reportaron muertos, la cifra de heridos asciende a los 111, de los cuales, Eduardo Hernández Esquivel continúa grave luego de recibir lesiones en el hígado durante el impacto.

Pese a que la empresa dueña de la concesión, Ferrocarriles Suburbanos ha asegurado que por medio de la aseguradora Zurich se cubrirán los gastos médicos de todos los heridos, es notoria la falta de experiencia y capacidad de la concesionaria, que en menos de dos meses ha sido responsable de dos accidentes, uno de ellos con resultados fatales.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes deberá de prender los focos rojos y realizar una investigación a fondo para deslindar responsabilidades, pues, pese a que las primeras indagaciones apuntan a “un error humano”, lo cierto es que la responsable de contratar a los operadores de los trenes y operadores de control es Ferrocarriles Suburbanos. Resulta inadmisible que en un transporte de trenes, se realicen obras de mantenimiento en horas de servicio.

También resulta complicadísimo no comparar el accidente del pasado sábado con los varios accidentes protagonizados por el Metrobús de la administración capitalina, accidentes que han sido magnificados por algunos medios de comunicación. Politizan la desgracia ajena acusando a la administración de Ebrard de inaugurar obras “al vapor”. No señalaron que Peña Nieto y el Gobierno federal inauguraron una obra “al vapor” pese a que al momento, el Suburbano ha cobrado la vida de dos obreros y ha dejado heridas a 111 personas. ¿Probó Ferrocarriles Suburbanos suficiente ineficacia como para serle retirada la concesión?

CINCO PREGUNTAS SOBRE LA CRISIS ECONOMICA

Gustavo Gordillo (http://gustavogordillo.blogspot.com/)

1.¿Qué es lo nuevo? ¿Estamos ante una verdadera depresión de características inéditas o, por el contrario, esa es una exageración que subestima la capacidad de respuesta del sistema?

Lo primero que hay que decir es que lo típico de esta crisis ha sido su subestimación. No sólo en México en donde hasta hace pocos meses el secretario de Hacienda la describía como un catarrito, sino también y sobretodo en los principales países desarrollados.Ha sido necesaria la transparencia política con la cual han acometido el diagnóstico de la crisis tanto Barack Obama en Estados Unidos como Gordon Brown en el Reino Unido, para que todas las elites reconozcan que no solo se trata sólo de una crisis financiera ni tampoco de una crisis que simplemente pueda asimilarse a otras relativamente recientes. Cada vez más si acaso se le asemeja con otra crisis es con la gran depresión de 1929. Aun así se trata de una analogía imperfecta por un aspecto que no han dejado de señalar varios analistas.Entre el mundo de 1929 y el actual hay una diferencia cualitativa que tiene que ver con el grado de interdependencia e integración de las economías hoy en día y particularmente sus circuitos financieros. Lo mismo puede decirse del papel que la interfase entre público y los medios masivos de comunicación tiene hoy en la formación de expectativas sobretodo en el ámbito económico y social.

De suerte que sí se trata de una crisis novedosa por estos elementos que he señalado y para la cual no tenemos mas remedio que experimentar con mecanismos y programas que puedan aliviar sus consecuencias mas desatrosas en términos de empleo y desigualdad, y eventualmente enfrentar sus causas más estructurales.

2.- Cada vez se escucha con mas frecuencia la idea de que es necesario “cambiar el modelo” que imperó hasta ayer. Sin embargo, según quien la sostenga, esa propuesta significa cosas muy distintas. ¿Cuál es su opinión al respecto?

Si por “cambiar el modelo” quiere significar el fin del capitalismo aunque yo también pudiera desearlo, no veo con que “otro modelo” podríamos sustituirlo. Habrá que ver la profundidad de la crisis y sobretodo los efectos que está ya generando en el tejido social por un lado y en la percepción de las elites políticas y económicas, por el otro. Se puede decir en cambio que ésta en una crisis de larga duración. No la crisis en forma de V – es decir una caida abrupta seguida por un relanzamiento también rápido; sino más bien la crisis en forma de L con una caída pronunciada seguida por un largo período de estancamiento. Se puede decir también que en las propias medidas que se están debatiendo: mayor regulación o mayores recursos fiscales – y sobretodo en su mezcla- se está prefigurando probablemente los nuevos paradigmas económicos que por lo menos hasta lo que es posible prever significarán una nueva versión de la economía mixta que con tan malos resultados fue abandonada tanto en Estados Unidos como en México. También creo que resulta claro que el nuevo “modelo” tendrá que enfrentar decididamente una forma de economía basada en la especulación, el consumismo y sobretodo la desigualdad y la ausencia de verderos generadores de nuevos empleos.

3.- El G20 adoptó una serie de medidas para frenar la crisis e iniciar la recuperación. ¿Cómo valora las distintas iniciativas pensando, justamente, en la realidad del mundo global?

Permanece irresuelto el conflicto central entre algunos gobiernos europeos –Francia y Alemania particularmente- y Estados Unidos respecto a enfatizar más los aspectos regulatorios incluyendo una nueva arquitectura financiera mundial y los aspectos de dinamización de la demanda por vía de paquetes fiscales. Sin embargo el tema central que tardará tiempo en resolverse pero que es crucial para el futuro del desarrollo mundial consiste en cómo asimilar una nueva correlación de fuerzas mundial que vendrá como consecuencia de esta crisis: la transformación indispensable del modelo norteamricano dilapidador y extremadamente consumista, el ascenso a potencias económicas indiscutidas tanto de China como en un ámbito menor pero no menos importante de India y Brasil, y la transformación que sin duda ocurrirá en el macro de la Unión Europea. Hasta el momento las medidas propuestas son tímidas,experimentales y altamente volátiles como lo es el mismo contexto internacional.

4.- El gobierno mexicano asegura tener una estrategia exitosa para remontar la recesión. ¿Cree usted que ésta sea la más adecuada para superar los costos sociales de la crisis? ¿Qué otras medidas de fondo deberían tomarse?

Al gobierno mexicano se le acabó ya el argumento cierto pero irrelevante de que la crisis nos vino de fuera y no fue producto de errores nuestros como en las anteriores crisis económica en México.

Lo que si es falso y en cambio, sumamente relevante es decir que la economía mexicana estaba blindada frente a la crisis. Francamente resulta ridículo presumir de una robustez que por cierto nadie acierta a descubrir cuando por otro lado llevamos casi 15 años de estancamiento económico; cuando tenemos unas finanzas públicas desfallecientes cada vez que cae el precio del barril o la cantidad de barriles exportados, o las remesas o las exportaciones; cuando hemos podido detener momentáneamente una crisis del tipo de cambio sólo através del ancla de los cuantiosos recursos solicitados al FMI y a la Reserva Federal de Estados Unidos; cuando la tendencia general es hacia un mayor desempleo y hacia la informalidad. Tarde o temprano, mas temprano que tarde y en ausencia de una rápida recuperación de la economía mundial –que se ve ahora con los recientes pronósticos del FMI inviable- el gobierno mexicano se verá confontado con unas finanzas desfallecientes, una volatilidad del sector externo y una población crecientemente desempleada e inquieta por decir lo menos. Será el momento en que toda la clase política tendrá que calcular los costos de mantener un rumbo sin rumbo como el actual frente a los costos sociales del desorden.

5. Las relaciones económicas con los Estados Unidos son esenciales para vislumbrar el futuro. ¿Cree usted que sea necesaria una revisión del TLC para actualizarlas? ¿Qué gana y que pierde México en el caso de una hipotética “refundación” del TLC?

Mi respuesta contundente es sí, debe revisarse el TLC. Pero quisiera calificar esta respuesta con tres comentarios. Uno, al TLC se la echado culpas propias y muchas ajenas.Sobretodo es difícil pero indispensable separar los efectos de la puesta en marcha del TLC sin al mismo tiempo evaluar los errores de implementación y los más graves errores de la ausencia de políticas públicas que debieron acompañar el proceso de apertura comercial. Segundo, en términos de algunos de los resultados planeados y esperados, tanto en atracción de inversión extranjera como en dinamizar algunos sectores de la industria manufacturera como la automotriz o en las maquilas; se puede decir que sus efectos se venían agotando aun antes de la irrupción de la crisis económica. Sobretodo la ausencia de una política industrial evitó que se dieran articulaciones y encadenamientos productivos.

Entiendo desde luego los peligros que sobretodo para nosotros se ciernen en un momento en que hay fuertes tendencias proteccionistas en Estados Unidos. Al mismo tiempo hay probablemente una serie de tendencias más amplias aunque quizás menos concentradas y visibles que buscan realmente una reestructuración –pensando en nuevas formas de inserción al mercado global- de los cimientos mismos de la economía norteamericana. Iniciar pláticas preliminares tendientes a revalorizar el TLC sobre la base de que ningun tema sea excluido de las discusiones –incluyendo desde luego la migración, los fondos de apoyo a regiones más deprimidas,etc.- podría mandar una poderosa señal a los habitantes de los tres países.Podría mandar un mensaje de aliento moderado en la posibilidad de una recuperación económica.

Me temo que la razón por la cual el gobierno mexicano está renuente a esa discusión es, más que las tendencias proteccionistas que se observan en Estados Unidos, su propia previsión de cuándo se iniciará la recuperación económica. Quizás conforme se convenza que esa recuperación vendrá más en el largo que en el corto plazo, comience a ver con otros ojos las ventajas de poner a discusión, en un marco más amplio que solamente el comercial, el TLC.

Tod@s somos Jacinta

Ciudadano Brando

Indignación, impotencia, rabia... son algunos de los sentimientos que te provocan casos como el de Jacinta Francisco Marcial, mujer mazahua, vendedora de aguas frescas que fue detenida por personal de la AFI, acusada de haber secuestrado a 6 agentes junto con otras dos vecinas. En realidad ellas resultaron ser los chivos expiatorios de una trifulca entre comerciantes ambulantes e integrantes de esa organización federal, y su único error fue encontrarse laborando o caminando por donde fue la bronca. Hasta la pregunta ofende pero, ¿es posible que tres mujeres desarmadas pudieran secuestrar a 6, ¡sí a 6! agentes entrenados en técnicas de combate y portando armas?

La condena dictada fue de 21 años de prisión después de haber pasado 3 más esperando sentencia. El de Jacinta es un ejemplo claro de cómo siguen existiendo casos impresionantes de impunidad, como los de las mujeres de Atenco o como el de un Ombudsman que sigue exigiendo responsables para el caso New´s Divine.

Hace unos meses el Juez que revisó el caso de Jacinta declaró incompatibilidad de declaraciones entre los agentes supuestamente secuestrados, pero la mayor de todas las fallas residió en que dicho Juez en vez de haber dictado nulidad a la sentencia, regresó el caso al mismo Juez que condenó a Jacinta desde un principio, ¡hágame usted el chi%&$# favor!... Las posibilidades para que un Juez cambie la sentencia sobre un mismo caso son remotas. Para variar, los altos funcionarios no se pronuncian al respecto, algunos diputados han ido a visitar a Jacinta, supongo que más como un medio publicitario, porque hasta el momento no han resuelto absolutamente nada.

Este caso ha sido abordado por algun@s periodistas como Ricardo Rocha, Denise Merker o Carmen Aristegui y ha tenido un gran respaldo de las organizaciones de la sociedad civil, en especial del Centro de Derechos Humanos Agustín Pro, quienes asumieron la defensa legal; sin embargo, es necesario un pronunciamiento más fuerte al respecto, porque no es posible que se cometan atropellos de esa magnitud contra la ciudadanía que no la debe y ya la teme. Es sumamente trillado pero es una humillante realidad que en nuestro país las y los principales delincuentes sean ¡los indígenas, las mujeres y los pobres!

La campaña a favor de Jacinta dice: ¡Tú podrías ser Jacinta! y es cierto, Tú, Yo y cualquiera podemos caer en esa situación si no ponemos un alto. Tod@s somos Jacinta.

Un garbanzo de a libra que resultó gatopardo. La semana pasada hablaba de que la ley que criminaliza la interrupción legal del embarazo había sido echada para atrás en Quintana Roo; sin embargo, en un hecho lamentable esta semana se volvió a subir y fue aceptada. Tal parece que la diputada priísta que la impulsó cabildeó mal los votos la vez anterior pero ahora sí planchó a su antagonista, otra priísta. Es así como Quintana Roo se convierte en el octavo estado que da un paso atrás en el avance de las libertades individuales en nuestro país.

¡Y aguas! porque esta semana se subirá a discusión en ese mismo estado la Ley de sociedades en convivencia, pero como el mago Chen Kai “nadie sabe y nadie supo” como va la ley. Pero eso sí, mañana pretenden declarar en ese estado el día en contra de la homofobia y la discriminación, esperemos que al menos eso no lo rechacen los H. asambleístas.

Perdone la molestia que le cause esta obra

Adolfo Sánchez Rebolledo

Apenas ayer David Brooks, corresponsal de La Jornada en Nueva York, reportaba las molestias causadas en ciertos círculos republicanos por la actitud del presidente Obama en los foros internacionales de semanas recientes. Previsibles muchas de ellas, lejos de restarle importancia, en realidad las puyas contra la supuesta debilidad del novel mandatario subrayan la trascendencia del nuevo estilo presidencial y la complejidad de la ruta recién iniciada. Sin duda, hay enojo y no sólo en las filas más conservadoras, pues incluso entre los que entre nosotros admiten su talento comienzan a presentarse fisuras, dudas, reticencias.

No es una exageración decir que varios de los formadores de opinión han sufrido para explicarse el tono distendido de la reunión de Puerto España, pues una cosa es aceptar el progresismo en Norteamérica y otra muy distinta aplicar la lección para América Latina (sin excluir a Cuba).

Para ellos, todo se reduce a cuestión de personalidades enfrentadas en la pugna entre el Bien y el Mal. Ni una palabra sobre la crisis. Ningún intento de comprender el derrumbe del integrismo democrático, impulsado por los Bush, repetido por los Aznar y sus epígonos locales, como los Fox; en suma, ausencia absoluta de reflexión sobre las promesas caídas del pensamiento único concentradas en el llamado Consenso de Washington. Pero también aquí hay extremos. Por ejemplo, Andrés Openheimer, gurú del periodismo sindicado, compara el libro de Eduardo Galeano, Las venas abiertas de América Latina (obsequiado por Chávez a Obama), con el Mein Kampf (Mi lucha), de Hitler. Uf.

Acostumbrados a pensar ubicándose en el lugar y la perspectiva de los intereses estadunidenses, numerosos comentaristas liberales, inclusive expertos en los temas de relaciones internacionales, viven en esa cuerda floja, entre la obamanía y el temor a que su mundo de certezas siga cayendo al vacío. (Son la contraparte de los que en la izquierda ya saben de antemano qué va a ocurrir.) Sólo un botón de muestra: cuando critican el embargo porque éste no ha funcionado demuestran cuál es su verdadero talante. En lugar de oponerse a una medida injusta, prepotente, sostenida sin cambios por casi cinco décadas (independientemente de la opinión que el régimen cubano les merezca) se suman al coro del realismo que pide quitar a los Castro el pretexto para continuar en el poder, aun cuando comprenden que el Congreso de Estados Unidos no lo hará porque...bla, bla, bla.

Y es que no la tienen fácil, pues una de dos: o niegan la profundidad de la crisis económica, institucional e ideológica que está en curso o la aceptan con todas sus previsibles consecuencias en la vida social.

Las cosas son de tal manera que ahora deben admitir que la intervención del Estado no siempre resulta ineficaz, que las nacionalizaciones son legítimas y que la redistribución del ingreso por la vía fiscal es el mecanismo más democrático al alcance de los gobiernos; que la propiedad privada no es sagrada cuando está en juego el interés general, que la democracia, en fin, requiere de una base de sustentación que no puede ser el capitalismo salvaje, depredador de la sociedad y la naturaleza.

A la luz de los cambios que parecen necesarios, me pregunto qué pensarán todos aquellos que honestamente pidieron no mezclar política y economía para no adjetivar a la democracia, cuando en realidad estaban renunciando a crear una verdadera ciudadanía.

En cierta forma, para hablar concretamente de México, pasamos de la esquizofrenia que daba por existente la democracia porque estaba plasmada en las leyes, al culto a los procedimientos, al desprecio por los grandes temas sociales que están en el fondo del pacto constitucional, elevando a la categoría de gran paradigma el esfuerzo individual, la empresa privada, la continua desacreditación de los bienes y los espacios públicos, la misma idea de comunidad de hombres libres que da origen al municipio.

En estos años nos hemos olvidado de la cultura como un componente esencial de la libertad, de modo que la educación del Estado se ha instrumentalizado al servicio del poder, en tanto que la enseñanza privada, vinculada de suyo a las iglesias y al poder económico, pasa a ser pieza esencial para la cohesión de las elites oligárquicas.

México mira al norte pero no entiende de qué se trata y cuando vuelve la vista hacia el sur apenas si se identifica con sus vecinos. Tanto hemos cambiado en estos años. El presidente Fox creyó que la cosa era ser y actuar como un americano más, pero antes de que se diera cuenta ya se había convertido en una caricatura impresentable de la vieja dignidad presidencial imaginada por el Constituyente del 17.

Calderón, más joven y más doctrinario que su antecesor, navega, sin embargo, como un pragmático, quizá porque su partido se quedó sin ideas propias antes de ponerlas en práctica, cuando la alianza con Salinas y Zedillo los llevó a la antesala del poder.

Aquel partido conservador que aspiraba a una República gobernada por la gente decente hoy sólo tiene una obsesiva preocupación: retener el poder para articularse a plenitud como un componente esencial del arreglo oligárquico. Al final, los actuales dirigentes del PAN no entienden que el cambio anunciado por la victoria de Obama es inseparable de la crisis de una sociedad que no puede seguir reproduciéndose sobre los mismos valores y esquemas.

Tal vez nadie sepa por ahora cómo y cuándo terminará esta brutal remodelación de la arquitectura social planetaria, pero es seguro que nada será como antes. Y eso es lo que no perciben en Los Pinos (y no sólo allí), creen que la crisis se resolverá administrativamente, mediante decretos o circulares de Hacienda. Tal vez convendría recordarles lo que escribió hace unas semanas en The Atlantic el ex economista en jefe del Fondo Monetario Internacional, Simon Johnson:

“La opinión convencional entre las elites continúa siendo que el actual desplome ‘no puede ser tan malo como la Gran depresión’. Ésta es una visión equivocada. Lo que tenemos ante nosotros podría de hecho ser peor que la Gran depresión: porque el mundo está ahora mucho más interconectado, y debido a que el sector bancario ahora es tan grande estamos ante un bajón sincronizado en casi todos los países, un desfallecimiento de confianza entre las personas individuales y las empresas, y problemas mayúsculos para las finanzas gubernamentales. Si nuestros líderes se despiertan ante las posibles consecuencias, aún podríamos ser testigos de una dramática toma de acción sobre el sistema bancario y la ruptura de la vieja elite. Esperemos que para aquel entonces no sea demasiado tarde”.

Cuidado. Crisis trabajando.

La retórica antipolítica
Por José Woldenberg

Imaginemos a un botánico que declarara que "no hay diferencias sustanciales entre las plantas". Y que al desarrollar su argumento subrayara "porque todas tienen raíz, tallo, hojas, fruto y clorofila". Se trataría de un típico caso en el cual el analista es capaz de distinguir lo que hace similares a un conjunto de individuos, pero es incapaz de apreciar sus diferencias.

Ahora bien, un destacado analista nos ha dicho algo similar sobre los partidos políticos: "a partir del comportamiento de todos los partidos en los últimos años, se puede concluir que no hay diferencia sustancial entre ellos". Eso escribió José Antonio Crespo en Excélsior (15-IV-2009). ¿De verdad es así o como en el caso del botánico más bien nos habla de la incapacidad para apreciar las diferencias significativas? Porque, en efecto, uno podría hacer una larga lista de los rasgos comunes que tienen todos los partidos, pero no detenerse en sus diferencias resulta impropio. La idea de Crespo, expuesta en un artículo llamando a la abstención activa, me interesa no tanto porque es desacertada, sino porque expresa una sensación muy extendida que es alimentada de manera rutinaria por no pocos medios y comentaristas e incluso por grupos políticos y asociaciones. Es una pulsión que se expande y que en no pocas latitudes ha sido explotada por políticos antipolíticos. Y no es una contradicción. Se trata de un discurso que rebasa fronteras, que explota el malestar con la política y que puede resultar disruptivo para la reproducción de la democracia.

Recurro a un texto de Andreas Schedler que lo ha expuesto de manera nítida ("Los partidos antiestablishment político", en Labastida, López Leyva y Castaños. La democracia en perspectiva. I.I.S.
UNAM. México. 2008. P. 123-152). Él detecta que a partir de los años noventa empezaron a invadir el escenario lo que denomina "partidos antiestablishment político" cuyo discurso central es el de acusar a los partidos establecidos de formar un "cártel excluyente" y "describen gráficamente a los funcionarios públicos como una clase homogénea de villanos perezosos, incompetentes...".

La operación "analítica" (si así se le puede llamar) no suele ser demasiado sofisticada. Más bien resulta elemental y Schedler reconstruye sus principales elementos: "Trazan un espacio triangular simbólico mediante la construcción (simultánea) de tres actores y de las relaciones entre ellos: la clase política, el pueblo y ellos mismos. El primero representa el villano malvado, el segundo a la víctima inocente y el tercero al héroe redentor".

Desde todos los rincones escuchamos las alabanzas al pueblo, a la sociedad, a los trabajadores como encarnaciones de todo lo virtuoso, mientras que los políticos, los partidos, los órganos representativos son la manifestación del mal. "Los partidos antiestablishment político (y no sólo ellos) describen un conflicto en específico como la división fundamental de la sociedad: el conflicto entre los gobernados y los gobernantes o, alternativamente, el conflicto entre público y política, electores y partidos, ciudadanos y políticos, sociedad y Estado, electorado y elegidos, mayoría (silenciosa) y élite... sociedad civil y partidocracia". "El atuendo semántico puede variar, pero el mensaje básico sigue siendo el mismo: los funcionarios públicos forman una coalición antipopular; han degenerado en una clase política".

Para que esa operación política e ideológica pueda abrirse paso se requiere en primer lugar homogeneizar a los políticos, verlos como un bloque indiferenciable, como una "clase". Si en la política democrática invariablemente aparece un o unos partidos en el gobierno y otro u otros en la oposición, el discurso antipolítico afirma que esa distinción no resulta significativa, que son lo mismo. Si en el espectro ideológico se reproducen izquierdas y derechas, desde la visión reduccionista tampoco resultan fundamentales, por el contrario son sólo imposturas que no dejan ver que todos son "la misma gata, pero revolcada". En una palabra, para que la pulsión antipolítica pueda avanzar se requiere primero convertir las diversas opciones en un conglomerado indiferenciado, y luego atribuir a ese monolito todos los males que aquejan a la venturosa y límpida sociedad.

Se trata además de un marco interpretativo que puede ser alimentado con facilidad. "Cada escándalo de corrupción, cada estadística de desempleo... cada devaluación de la moneda, cada catástrofe natural, cada affaire sexual de un ministro... todos esos incidentes aislados se interpretan invariablemente como síntomas contundentes, como pruebas convincentes del fracaso generalizado de los partidos". Y es que en efecto, una vez que se construye el filtro antipolítico para acercarse a la "cosa pública", nunca faltarán episodios para alimentarlo.

El problema mayor reside no sólo en que ese código impide descifrar lo que realmente sucede en la esfera de la política, sino que sigue alimentando el desprecio hacia ella.

Calladito te vez más bonito

Por: Fidel E Gómez

En el transcurso de la historia la iglesia ha participado en la política , de los cuales muchos de los actos han terminado en tragedias, parece que se le olvida su principal función que es el aspecto social y en cambio busca deslindarse o apoyarse de esta metiéndose a lo político buscando más poder del que tienen.

El pasado viernes 17 de abril el arzobispo de Durango, Héctor González Martínez, declaró que “adelante de Guanaceví vive Joaquín El Chapo Guzmán, todos lo sabemos, menos la autoridad”. A primera vista nos damos cuenta de la insuficiencia del trabajo que se tiene ante el aspecto de la seguridad por parte del gobierno, no niego que la critica este bien dirigida ya que todos tenemos el derecho de expresarnos y también de que debemos de dar a conocer las inconformidades ante los temas que tienen que ver con nuestra vida ya que al denunciarlas se está exigiendo calidad en la forma de llevar a cabo las cosas. Pero hay discursos de los cuales se debe pensar las consecuencias que puedan ocasionar y aun mas si se tiene un poder con un gran impacto social como es la iglesia.

Como respuesta a lo dicho por el arzobispo González, en la mañana del martes cerca de la región donde dijo que vive el chapo Guzmán, que ha sido ubicado como uno de los principales capos del narcotráfico, se localizaron los cuerpos de dos personas que fueron identificadas como militares, estos portaban ropa de civil, con las manos atadas y el rostro cubierto con cinta canela y con ellos una leyenda de advertencia: “Con El Chapo nunca van a poder ni sacerdotes ni gobernantes”.

A pesar de la impactante reacción que se ocasionó ante la declaración del arzobispo, varios eclesiásticos la defendieron, como es el caso del obispo de Matamoros que subrayó que los clérigos de la Iglesia católica seguirán pronunciándose en contra de la delincuencia organizada porque ésta atenta contra la dignidad humana. En cierto punto es reactiva la actitud del obispo ya que está declarando su inconformidad pero se debe de dar cuenta de que no todas las declaraciones son factibles de darse a conocer con tan gran libertad, ya que el arzobispo Gonzalez al dar la declaración sobre el chapo, no solo ocasionó el atentado en contra de los dos militares si no también está poniendo en peligro su propia vida.

El impacto social es muy importante en un discurso pero es más importante la seguridad de las personas. Hay momentos que los comentarios se deben de restringir a una cierta escala y darse a conocer por otro medio que no tenga consecuencias tan desagradables.

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